lunes, 29 de enero de 2007

Infanticidas pasivos y cortinas de humo

Uno no se pone a pensar todos los días en cuantos niños mueren en Colombia, deben ser cientos, pero son anónimos, por eso me ha generado ganas de vomitar la cobertura de los medios a las muertes de niños durante las ultimas semanas, lo curioso es que es poco lo que muestran de muerte por conflicto, la nueva moda de los medios (y esto va marcado especialmente para los medios audiovisuales), es la de mostrar dolorosas muertes de niños que son completamente alejadas del conflicto que sufre Colombia.

Hoy en día es noticia el sufrimiento de la niñez, desde las hermosas siamesas que murieron por una cirugía complicada, pasando por el niño succionado por una piscina y llegando al infante que acabo la vida de su mejor amigo durante un juego. Si, jugoso, altamente jugoso, nada mejor que la muerte de un pequeño para darle de comer a ese monstruo hambriento llamado rating.
¿Donde esta la línea que separa la información del morbo callejero?, o lo que es peor ¿existe una línea que las separa? Actualmente y con toda esta complacencia de los medios por la muerte infantil parece que no hay diferencia alguna entre tabloides cuya función es alimentar el morbo y un noticiario en horario triple A, donde los televidentes somos dolientes de esos dramas, volviéndonos parte del negocio de la muerte, mientras ellos se convierten en infanticidas pasivos.

El crear cortinas de humo hechas con el dolor que una familia los hace cómplices también de aquellas cosas que están encubriendo, pues mientras en el país se debate la legitimidad de un Estado infiltrado por grupos al margen de la ley, los noticieros privados aprovechan para dirigir la emotividad del los televidentes hacia temas que por ser dolorosos, no dejan de ser banales, es decir, que son parte del duelo de una familia o de noticias de segunda franja.

Lo complejo de escribir este post es la idea de pasar por indolente, pero a pesar de que me parece dolorosa la muerte de un niño hay noticias por las cuales nos debemos preocupar mas, noticias que amenazan la supuesta estabilidad democrática de este país.

Es hora de que los medios nos muestren verdades, no señuelos emocionales para distraernos.

viernes, 26 de enero de 2007

A mi no es que me importe

En estos días he estado viendo mucho las noticias, mi situación vacacional me deja mucho tiempo de ocio por lo cual me veo los noticieros completos a veces tres veces al día, viendo las tan criticadas secciones de farándula con un interés mas bien morboso he visto algo que me ha parecido el colmo, de verdad, a mi no es que me importe un bledo la vida privada de nuestra barranquillera-argentina Shakira, pero he visto la polvareda que ha generado la realización de un sugerente video con el ibérico cantante Alejandro Sanz, resulta curioso que las secciones de farándula de los noticieros hayan emprendido una campaña de alcances celestinos para unir a estos dos artistas cuando es de publico conocimiento que la cantante ya esta en una relación al parecer bastante estable con Antonio de la Rua, hijo del otrora presidente de argentina, Fernando de la Rua.

Bueno para analizar la situación de este personaje hay que ver las dos caras de la manera, por un lado…. Mierda, esta con Shakira. Buena comida, viajes, me imagino que al interior del cuarto la cosa debe ser buena (obviamente las caderas hiperkineticas de Shakira, dan testimonio vertical de un acto horizontal), en fin, el sujeto esta cagado de la risa con esa novia ¿y quien no? ¡Ah! Pero por otro lado esta la prensa, sinceramente al Toño no le cae bien a nadie, para la muestra el siguiente fragmento de un articulo sobre una supuesta ruptura entre la colombiana y el retoño de la Rua "Uno no se explica cómo un hombre como Antonio, que supuestamente es un gran profesional y fue asesor de la Presidencia de Argentina, termine como un asesor de bajo perfil de su novia y que viva de ella. Creo que es por su dinero" (fuente: Terra.com). ¡Que tal! El pobre tipo es considerado un mantenido, la veracidad de estas afirmaciones tampoco me importa mucho, lo que en realidad me importa es el papel de los medios en todo este embrollo.

Bueno, como ya se pudo notar, la farándula Colombiana no quiere a De la Rua, porque es aparentemente un mantenido (y e imagino que también por sus problemas de peso), Pero siente simpatía por Sanz, el personaje del “corazón partio”. Que mejor pareja para la heroína nacional, la barranquillera dorada, que un hombre sensible, español y que además ¡¡¡gana su propia plata!!!
Yo la verdad, a pesar de simpatizar con el español n puedo negar que hay algo muy sucio en todo esto, imaginemos el cuadro: Es un domingo, Shakira y Antonio están “arrunchaos” viendo las noticias Colombianas, cuando de repente empiezan a hablar de el posible romance de su novia (la que esta al lado suyo, con los ojos abiertos y gesto de sorpresa) con un famoso y atractivo cantante español. Por mas seguro que este de la relación se va a poner paranoico, va a dejar de abrazar a su novia y va a nadar a la piscina un rato con la cabeza cargada de suposiciones, sospechas y celos.

De verdad, no hay ego masculino (ni siquiera el de un delfín argentino), que pueda soportar que le anuncien los cachos que posiblemente le coloca su novia, sobre todo en televisión, para toda América latina y con ese tufillo de complicidad que le han dado los medios colombianos. Desde esta tribuna le mando mi apoyo moral al pobre Antonino pero sobretodo un soberano jalón de orejas a la noticias de farándula (no me importa si sean con estilo o del otro mundo): El periodismo se basa en hechos, no en conjeturas o suposiciones salidas de un video musical en el que se ACTUA, por favor farandulistas, es claro que la farándula es la forma mas baja de periodismo. Pero dignifíquenlo un poco dejando de sembrar cizaña. Dejen a Antonio y a Shakira en paz y por favor si lo que están diciendo de Sanz es cierto, no se metan (de pronto les tiran el parche).

OJO a mi no es que me importe.

Nada me preparo para volver a ser soltero (escrito en diciembre 2006)

Nada me preparo para volver a estar soltero, es decir después de tres años de relación estaba acostumbrado a estar con alguien de cualquier manera en cualquier plan. Tenia contacto humano y una conversación interesante asegurada, Ahora después de 6 meses de haber terminado con mi pareja me siento completamente desubicado, Encuentro que toda la gente con la que salía ya tiene otros grupos ya hace otras cosas, es decir que el mundo no dejo de girar mientras no estaba por lo tanto tengo que girar mas rápido para recuperar el tiempo en el cual me quede con un estrecho circulo de amigos y no salía a conocer gente. Es ahora cuando me doy cuenta que es necesario absolutamente necesario estar conociendo gente todo el tiempo, después de tanto tiempo trato de recuperar amistades pero ya no resulta igual, me vuelvo una especie de tísico al cual se le saluda pero no se le acerca. Será talvez que apesto a soledad? Y como la tisis la gente simplemente te me que la contagie?

Resulta curioso acostumbrarse de nuevo a empezar a flirtear con muchachas, no es fácil, no lo recuerdo y solo cosecho bagazo, nada, ¿será que el olor a soltero llega a todos los rincones? ¿Será que como dice el cuento, el que muestra el hambre no come? Resulta complicado esto y la verdad no me quiero acostumbrar a la soledad, me parece francamente deprimente. Aunque se que las cosas van a mejorar y esto no va a ser sino un impasse a veces siento como si toda mi vida hubiese estado solo y que todo el resto de mi vida lo fuera a estar.